Alan defiende venta "Dice que no debemos hacernos problemas en construir en el aeródromo. Pero no habla sobre venta ilegal".
DETALLE
El consorcio peruano-chileno Graña y Montero-Besco ya pagó al Estado 29 millones de soles por la entrega del aeródromo de Collique. Aún existe una investigación fiscal sobre este caso en el que está involucrado el ministro Enrique Cornejo y la ministra Nidia Vílchez.
“¿Por qué hacemos tantos problemas para empezar a construir?, que lo haga DH Mont (empresa que impugnó el proceso) o que lo haga Graña (que era la ganadora inicial) es absolutamente accesorio (…) la empresa Mont fue al Tribunal Constitucional con todo derecho y lo que el tribunal ha dicho es que se haga la obra, pero que continúe con esta empresa”, resumió Alan García.
Para el jurista Fernán Altuve, sin embargo, esta insistencia de García en una venta que es altamente cuestionada por afectar intereses nacionales y provocar daños ambientales en una amplia zona, demuestra que el mandatario sí tuvo y tiene un interés subalterno en esta operación, y que de alguna manera está implicado personalmente en el proceso para digitar un ganador.
“Pero como García no acepta esta derrota jurídica y política, con este fallo, entonces no le queda otra que asegurarse con la otra empresa, DH Mont, demostrando una vez más que gobierna sin respetar los derechos del pueblo”, indicó el letrado.
No se puede vender
Altuve precisó que el tribunal ha resuelto sólo la primera parte del caso, es decir, la ilegalidad en el proceso de adjudicación que dio a Graña y Montero y la chilena Besco como ganador, violando los derechos de otro postor; pero falta resolver la segunda parte, que es la imposibilidad jurídica de vender el aeródromo, sea quien sea el postor, porque el aeródromo fue un regalo del pueblo al Estado para impulsar la aviación civil peruana.
La oportunidad para dar marcha atrás en un proceso que ha dañado aún más la imagen del gobierno, estaba abierta por el fallo del tribunal.
Pero García nuevamente ha evidenciado que no escucha razones y que confunde autoridad con intolerancia.
Por eso ha hecho depender la solución al déficit nacional de vivienda de la destrucción de la Escuela de Aviación, como si no hubiera terrenos libres en otros lugares.
“Lo que sigue en este caso es que el consorcio ganador devuelva las 32 de las 64 hectáreas del aeródromo que el gobierno le entregó hace un mes. Todo regresa al punto en que DH Mont quedó como único postor de la adjudicación, pero el tema de fondo es que estos terrenos no pueden ser vendidos, algo que al presidente García parece no importarle”, indicó Altuve.
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